jueves, 11 de diciembre de 2014

Camarada KIM JONG IL

                                           
            (Algunas reflexiones en el III Aniversario de su doloroso deceso)
                                                                                                         
Al fallecer el Gran Líder Camarada KIM IL SUNG, todos sentimos, en particular el pueblo coreano, una sensación de orfandad. Había dejado de latir para siempre el noble corazón del Jefe de Estado más joven de los que acordaron la paz después de finalizar la conflagración conocida como la II Guerra Mundial. El Gran Líder que inició la construcción del socialismo en la península de Corea recién liberada de la ocupación japonesa. Pero quizá la hazaña más significativa fue que logró la subsistencia victoriosa de la ruta socialista por la vía JUCHE en Corea, no obstante el colapso de la URSS  y de las democracias populares de Europa y Asia en los inicios de los años 90´s del Siglo pasado.
En estas complejas circunstancias, correspondió al sucesor y entonces novel dirigente KIM JONG IL hacerse cargo de la conducción del Gobierno, de las Fuerzas Armadas y del Partido del Trabajo de Corea. Algunos en el mundo que desconocen la realidad y las sutilezas de la vida socialista que se construye en la República Popular Democrática de Corea (RPDC) se atrevieron a presagiar que la caída de ésta en manos del capitalismo, que resurgía hegemónico y boyante como consecuencia de la desaparición de la Unión Soviética, era cuestión de breves días.
La sabia y eficaz conducción del Gran Camarada KIM JONG IL, inspirado en la idea Suche y en la política del Songun, desmintió con creces a los agoreros del desastre de la RPDC. A pesar de las múltiples condiciones mundiales adversas de carácter político y económico, así como inesperados desastres naturales, no sólo se fortaleció la vía socialista en la RPDC en los planos industriales, científicos, tecnológicos, agropecuarios, educativos y culturales, sino que se logró la sorprendente hazaña de colocar en órbita espacial terrestre el primer satélite coreano con tecnología propia.  
Por eso, además del sorpresivo fallecimiento el 17 de diciembre de 2011 del Gran Camarada KIM JONG IL, acrecentó el dolor y la tristeza de su pérdida  que en los actos celebratorios del I Centenario del Natalicio del Gran Líder y fundador de la RPDC, Camarada KIM IL SUNG, ya no contamos con su presencia. Esta circunstancia fue muy impactante para todos y en particular para quienes desde todos los lugares del planeta de fuera de la RPDC, tuvimos la fortuna  de participar en los actos celebratorios del mes de febrero de 2011, al ser honrados con la invitación para estar presentes en tan significativos e inolvidables acontecimientos, tanto en la bella capital Pyongyang como en otros históricos lugares de Corea, como el sagrado Monte Paektu.
Los grandes hombres como lo fue el Gran Camarada KIM JONG IL, que supieron interpretar con fidelidad las más profundas y grandes aspiraciones de sus pueblos, luchando sin tregua por hacerlas realidad son inmortales. Siempre estarán en el corazón y en la memoria de sus contemporáneos y de sus descendientes.
Por estas breves consideraciones, desde México, la tierra de Hidalgo, Morelos, Benito Juárez, Zapata, Francisco Villa, Lázaro Cárdenas y Vicente Lombardo Toledano, tengo el honor de rendir homenaje sincero y emocionado, en el III Aniversario de su doloroso fallecimiento al inolvidable y Gran Camarada KIM JONG IL. Su obra y su pensamiento son ejemplo imperecedero para las nuevas generaciones de luchadores en Corea y en el mundo por un mundo mejor, en el que prevalezca y se disfrute para todos y para siempre la justicia social, la belleza, el arte, la poesía, la cultura, la salud y el bienestar: EL SOCIALISMO.
                                                               México, D. F. a 3 de diciembre de 2014.
                                               Jesús Antonio Carlos Hernández,

                                               Secretario General del Partido Popular Socialista

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